Entradas

20 de noviembre de 2017

Aquella mañana Alicia se había despertado como todas las mañanas, y casi por la misma causa; el socorrido claxon. Cada mañana era algo diferente, ésta, en concreto, parecía declarar el frío de las palomas cuando comienza el día, y el sueño deja de ser tan profundo. Mira a su alrededor y comprueba que él se ha marchado. Una vez más. Él siempre se va de todas las formas posibles; luego desaparece. Y eso le recuerda que las palomas con frío, al menos se sienten libres.
Entradas recientes